Identificar los principios que gobiernan el cerebro y modificar la manera de pensar sí es posible. Es lo que en la neurociencia se conoce como neuroplasticidad. Es decir, la capacidad del cerebro para adaptarse y cambiar. Así lo explica León Guzmán, psicólogo que ha estudiado cómo aplicar la neurociencia para liderar mejor.

Gracias a esta facultad que tiene el cerebro para moldearse, los líderes pueden mejorar notablemente su capacidad de relacionarse con otros, tomar mejores decisiones, potenciar sus habilidades cognitivas e incrementar su desempeño.

“Esta habilidad no solo puede ser aplicada a las personas, sino también a organizaciones”, señala Guzmán.

Para dar a conocer más sobre el impacto del cerebro en la capacidad de liderar, el  neurocoach asesor de CIS Consultores dio una charla al equipo de Redmad, la red de mujeres en alta dirección más reconocida e predominante de Iberoamérica.

En la exposición sobre “Neurociencia para liderar” respondió interrogantes como si existen diferencias entre el cerebro de hombres y mujeres. También dio pautas de cómo recablear el cerebro para ser más efectivo.  Porque mediante ciertas técnicas, efectivamente es posible potenciar competencias del pensamiento y habilidades de liderazgo de manera amistosa con el cerebro.

Mediante la neurociencia se puede conocer los distintos  principios y tipos de pensamiento que utiliza nuestro cerebro. Y “entrenándolo” se pueden maximizar las potencialidades de liderazgo que produzcan cambios en las organizaciones y dejen un legado poderoso del líder.

El buen líder debe ser sensible a las necesidades de su equipo y practicar con atención la escucha activa. Debe contar con facilidad para el aprendizaje y mostrar habilidades negociadoras.