Más que una incorporación, la llegada de Cristián Bowen a CIS es un reencuentro. Porque este ingeniero civil de Industrias hizo un “paréntesis” en la consultora el 2014, al asumir como subsecretario de Transportes. Ahí trabajó en un tema que domina y en el cual se ha especializado. De hecho, tiene un diploma en Ingeniería de Transportes y es profesor de la cátedra Movilidad y Políticas de Transporte Urbano. Asimismo, ha asesorado en esa materia a parlamentarios, ministros y empresas.

Además, Cristián Bowen es economista y Master in Public Administration de Harvard. En paralelo a CIS, dirige “Infinity H2”, empresa orientada a la creación de soluciones de valor con hidrógeno verde.

Por otra parte, también se ha desempeñado en áreas de análisis estratégico, gestión, transformación organizacional y materias regulatorias.

-¿Qué desafíos tienes en CIS?

En la recién fundada área de Impacto Público estamos ayudando a desarrollar proyectos emblemáticos importantes que afecten positivamente a la comunidad. Ayudamos a que las empresas entiendan y gestionen de mejor manera esas  iniciativas, que son complejas. Por ejemplo, proyectos de infraestructura de transporte, energía y reciclaje. Nuestra tarea tiene que ver con asesorar a los clientes para que desarrollen exitosamente sus sueños, sus aspiraciones e ideas.

SELLO PROPIO

-¿Cuál es la fórmula de una buena consultoría?

Es una mezcla entre confianza, profesionalismo y también imaginación. Se trata de hacer el trabajo bien, con rigor, y así ganarse el respeto y la confianza del cliente. Se necesitan buenas ideas, pero también saber escuchar los puntos de vista de los clientes.  Todo eso hace que una consultoría sea memorable y que quienes nos contraten después hablen bien de nosotros.

-¿Cómo te proyectas de aquí a 5 o 10 años?

En el futuro, el área de Impacto Público va a ser muy importante. Estaremos trabajando con actores muy relevantes del mundo público y privado, logrando proyectos que colaboren con un desarrollo más sustentable.